PROSTITUCIÓN Y TRATA DE SERES HUMANOS

La trata con fines de explotación sexual supone el principal tipo de trata, contiene una cierta relación con la prostitución además de un gran número de víctimas, aproximadamente 4,5 millones donde el 90% lo constituyen mujeres y niñas. Esto significa que la trata de personas, además de ser una violación de los derechos humanos, es a su vez una forma de violencia de género. 

Las víctimas son sometidas a explotación sexual forzosa, sin embargo, desgraciadamente existe una gran dificultad para demostrar que mujeres que son prostituidas son víctimas de las redes de trata. Esto es así debido a que la ley exige una tipificación del delito con el reconocimiento expreso por parte de la víctima, que al encontrarse en una vulnerable situación por las amenaza de los tratantes, deciden no denunciarlo ya que esto podría acabar con sus vidas o las de sus familiares. 

Este fenómeno afecta a todas las naciones del mundo, un estudio de la OIT aseguraba que las investigaciones habían hallado víctimas de trata con fines de explotación sexual procedentes de 152 países distintos. España es un destino como tránsito para la trata, se ha comprobado un incremento de mujeres inmigrantes que son objeto de explotación sexual. También existen perfiles de mujeres de origen autóctono y con cargas familiares, sin embargo, las principales víctimas son procedentes de otros países, traídas por ser engañadas con falsas promesas de trabajo.



La trata con fines de explotación sexual presenta grandes secuelas y consecuencias en las víctimas, tanto físicas como mentales. Los estudios señalan que más de la mitad de las víctimas  has sufrido violencia sexual o física (o ambas) provocando daños psicológicos en ellas. Encontramos que el 42% presenta trastornos de ansiedad, el 61,2% depresión (una de cada seis víctimas asegura que ha tenido pensamientos suicidas) y un 14,9% estrés post traumático.

Entre las cifras de los niñ@s podemos encontrar gran similitud con la de los adultos: los investigadores encontraron que un tercio había sufrido violencia sexual o física (o ambas), que el 23% contenía lesiones graves y que se habían normalizado los problemas de salud mental. Más de la mitad de los jóvenes habían padecido depresión, el 33% trastornos de ansiedad y una cuarta parte estrés post traumático. Muchos de ellos se autolesionaban y/o habían tenido pensamientos suicidas.

El 80% de las mujeres que ejercen la prostitución lo hacen contra su voluntad, más de cinco millones son víctimas de trata. La trata de mujeres existe porque la demanda de prostitución es inabarcable con la oferta actual, si quiere frenar y combatir la trata, no sea demandante de prostitución. 

"Desde el colegio Jesús y María"


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